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10 Destinos para la fiesta de Halloween

Algunos destinos que se han vuelto populares y en atractivos turísticos para quienes les llama la atención este tipo de lugares por la historia que hay detrás de estos, llena de misterio, leyenda, tragedia...

Sus orígenes

Los escoceses celebraban la víspera del Día de los Santos; los celtas el fin del verano porque comenzaba la estación oscura, luego esta fue adoptada por los romanos, que coincidía con el día católico de todos los Santos.

En Estados Unidos y Canadá, los inmigrantes irlandeses, a finales del siglo XIX, fueron quienes difundieron la costumbre de tallar la calabaza gigante con una vela adentro. Posteriormente se fue difundiendo hasta cruzar fronteras, gracias al cine, televisión y la publicidad.

La popularidad ha producido todo un mercado alrededor de esta festividad de grandes y chicos. Disfraces, fiestas, decoraciones especiales y comidas en las que predominan los colores naranja y negro.

Lugares turísticos recomendados para visitar en Halloween

1. Castillo de Bran o de Drácula en Transilvania

Este castillo es el lugar obligado cuando viajas a Rumania, queda exactamente en Transilvania rodeada por los montes Cárpatos y a donde llegan los turistas atraídos por la leyenda de esta fortaleza medieval, que aún se conserva en buen estado.

Durante el recorrido por este lugar conocerá el patio central, la sala de la cancillería con muebles europeos renacentistas, el dormitorio real, la sala de la música, torres y torreones.

La historia gira en torno de Vlad, el príncipe de Valaquia, que se volvió famoso por la forma como mataba a sus enemigos, los mandaba empalar mientras almorzaba. Al parecer estos actos no sucedieron allí, ni Vlad vivió allí. Sin embargo, la leyenda se popularizó porque se supone que en este lugar fue capturado.

El castillo también es conocido por la novela Drácula, del escritor irlandés “Bram” Stoker quien nunca viajó a Transilvania, pero que gracias a sus investigaciones, los escenarios en los que transcurre la historia de su personaje, son muy semejantes a este lugar.

2. Catacumbas de París

Las paredes de esta red de túneles que cubren unos 300 kilómetros están forradas por los cráneos y los fémures de unas 6 millones de personas que fueron llevados allí en el siglo XVIII para combatir las epidemias que asolaban a la población por aquella época.

Actualmente por seguridad, los visitantes tienen acceso a solo un kilómetro de lo que antiguamente fueron las canteras de París, donde el ejército alemán construyó un bunker y además se utilizó como cuartel general por la Resistencia durante la Segunda Guerra Mundial.

La entrada de las Catacumbas queda a unos 5 minutos de los Jardines de Luxemburgo y a la salida encontrarás un almacén donde hay infinidad de artículos, todos relacionados con este inmenso osario.

3. Museo de las Brujas de Salem

En este lugar se encuentran la mayoría de las leyendas e historias, acerca de la práctica de la brujería. En una historia de la Edad Media se relata como 20 jóvenes de Salem fueron condenadas a muerte a ser juzgadas por practicar este tipo de rituales.

Durante el recorrido, se ven los escenarios de tamaño natural en los hay figuras representativas de todos los estereotipos alrededor de la práctica de la brujería, desde la caza de brujas, ceremonias satánicas, hasta lo que se hace hoy en día..

Salem, llamada la “Ciudad de las Brujas” queda en la costa del condado de Essex, en el estado de Massachusetts, al norte de Boston.

4. Isla de las Muñecas de México

La Isla de las Muñecas es una chinampa de la laguna Teshuilo, ubicada en los canales de Xochimilco, cerca del Estadio Azteca y es una de las principales atracciones turísticas al sur de la Ciudad de México.

Cuenta la leyenda que el cuidador de la isla encontró una niña ahogada por los lados de esta chinampa y poco después halló una muñeca flotando en el agua y la colgó en uno de los árboles en honor del alma de la menor.

Durante 50 años este señor siguió recolectando y colgando muñecas en todos los árboles de la isla, hasta que falleció ahogado en esta misma laguna. Ahora es una atracción turística, con un fondo trágico.

5. Alcatraz, la cárcel más temible de Estados Unidos

Alcatraz es una isla con un faro, ubicada en el centro de la Bahía de San Francisco, que fue utilizada como fortificación militar, prisión y luego cárcel de máxima seguridad, a donde se llevaban los delincuentes más peligrosos, entre los que estuvo Al Capone, el famoso gánster estadounidense de los años 20 y 30.

Ahora, es parte de los sitios turísticos de San Francisco y sus visitantes, que llegan en ferry desde el muelle 33, lo hacen por la curiosidad que causa este sitio lleno de historias y leyendas fantasmales.

Cuentan varios testigos, que en este edificio se han vivido varias actividades paranormales. En 1980 uno de los guías de la antigua prisión afirma haber visto el fantasma de un preso llamado Johnny Haus y unos turistas aseguraron haber escuchado los gritos y llanto de una mujer que vieron a través de la ventana de una celda.

6. Iglesia de San Jorge en República Checa

Esta iglesia medieval del siglo XIV, ubicada en el pueblo de Luková en la República Checa, en 1968 durante una ceremonia religiosa parte del techo colapsó y la gente empezó a decir que estaba maldita. Algunos propusieron restaurarla, pero el costo era altísimo y la dejaron así.

Sin embargo, en el Departamento de diseño de bellas artes de la Universidad de Bohemia Occidental pidieron a sus estudiantes presentar como trabajo de grado instalar obras en varias iglesias en ruinas.

La iglesia de San Jorge fue asignada al estudiante Jakub Hadrava, quien creo varias figuras fantasmales de yeso, sentadas, inclinadas y de pie en los corredores del templo para recordar que este recinto alguna vez fue un sitio concurrido por los feligreses. Ahora es un lugar donde se dan cita los turistas que llegan a Luková.

7. Capilla de los huesos en Portugal

“Nosotros, los huesos que aquí estamos, por los vuestros esperamos”, esta es la frase que se encuentra a la entrada de la Capilla de los Huesos y con la que se recibe a los visitantes que llegan allí.

Esta capilla contiene los huesos de 5.000 personas que fueron a parar a este lugar por pura necesidad. Durante el siglo XVI, los cementerios de Évora no tenían más fosas disponibles, por lo que se exhumaron los huesos que se pegaron con cemento en las paredes y techo de este lugar sagrado, para que estuvieran más cerca de Dios.

8. La ciudad de los muertos de Rusia

Dargavs es una antigua aldea localizada en Osetia del Norte, al sur de Rusia a unas dos horas en avión desde Moscú. La curiosidad sobre el sitio es la leyenda, según la cual quien iba allí no salía vivo, por lo que la gente de la región evitaba ir a este lugar.

Las 100 criptas fueron construidas en forma de refugio con techos curvos y picos agudos en la parte superior, diseño típico de la arquitectura Nakh, cuentan al respaldo con una torre cuyo propósito es vigilar las almas. Las más antiguas son del siglo XVI, donde se llevaban los cuerpos de las víctimas de la plaga que azotó la zona por aquella época.

Aunque es un lugar poco visitado, este pueblo tiene su atractivo con sus casas blancas, sin embargo cuando accedes a estas, solo se encuentran los restos humanos de quienes fueron dejados allí, con su ropa y sus pertenencias.

9. Craco, el pueblo abandonado de Italia

El antiguo Craco, ubicado sobre una colina de 400 metros de altura, en la provincia de Matera (Italia) es ahora un pueblo fantasmal en ruinas y abandonado por sus moradores, quienes tuvieron que salir de allí por el peligro de derrumbe de sus casas a causa de varios temblores.

El circuito turístico en este pueblo desolado y ahora en ruinas, que ha sido escenario de varias películas, permite recorrer sus calles entre fachadas destruidas, casonas imponentes, iglesias antiguas, las torres del Castillo ubicado en la cima, desde donde se puede tomar una de esas panorámicas para postal.

10. Bosque de los suicidios en Japón

Aokigahara es un bosque a los pies del Monte Fuji, también es llamado “Mar de Árboles” y “Bosque de los suicidas”, que se convirtió, desde los años 50, en uno de los lugares preferidos por los suicidas.

El turismo se ha limitado a unas zonas vigiladas, aunque no se prohíbe adentrarse en el bosque, donde se encuentran mensajes que disuaden a las personas a no suicidarse.

Según los lugareños, este bosque es objeto de una maldición donde habitan demonios, bestias, monstruos, fantasmas y duendes. Actualmente es un lugar fantasmagórico, pues cuentan que los muertos deambulan por allí, buscando consuelo.


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