El Día de los Muertos de México, declarado Patrimonio Cultural e Inmaterial de la Humanidad, es una tradición derivada de la fusión de las costumbres indígenas y la fe católica de los españoles, que se celebra anualmente, en todas las poblaciones del país Azteca.
Alrededor de esta costumbre milenaria, los mexicanos se esmeran preparando todas las actividades y comidas especiales para honrar a sus muertos. Así es como se llevan a cabo desfiles, rituales, serenata de mariachis, ofrendas, la feria del chocolate y Pan Muerto, entre muchas más.
La tradición indica que las ánimas llegan en orden diario, al medio día, desde el hasta el :
- Llegan quienes murieron a causa de un accidente, muerte repentina o violenta y las almas perdidas
- El día es dedicado a los ahogados
- Se reciben a las ánimas solas y olvidadas por su familia, los huérfanos y los criminales
- Se espera a las almas que están en el limbo, los que nunca nacieron o no fueron bautizados
- Los protagonistas son los niños, quienes se cree son “angelitos”
- El último día es para los adultos
“El muerto al cajón y el vivo al fiestón”
Una de esas noches no se duerme, las familias acuden a los cementerios a velar, orar y acompañar a sus difuntos y después de rezar toda la noche, algunos contratan a conjuntos de mariachis quienes interpretan frente a la tumba las canciones preferidas del fallecido.
Las tumbas son adornadas con flores Cempasúchil o de muerto que vienen en diferentes colores, pero el más usado es el amarillo, para iluminar el camino de los seres queridos. Estos altares son elaborados de dos, tres y siete niveles.
El primero se encuentra representado por el cielo y la tierra, el segundo se le agrega el purgatorio, y el más completo lleva sobre un mantel blanco las imágenes de un santo y de las almas del purgatorio, sal para purificar, pan de muerto, agua, calaveritas de azúcar, veladoras, incienso, licor, alimentos, fotos familiares y algunos objetos personales del difunto.
Gastronomía
La comida por estos días cobra protagonismo, ya que se supone que los muertos vienen por sus platos preferidos, por lo que las familias se esmeran en preparar los platos más especiales, como el relleno de pavo blanco o de gallina y el mucbipollo, que es una especie de tamal envuelto en hoja de plátano y cocinado bajo la tierra según la costumbre Maya.
Otro alimento es el Pan de muerto, al cual le dan diferentes formas, como los huesos encima de un amasijo redondo, representaciones de cadáveres, calaveras coloridas con chocolate, azúcar, cereales y amaranto.
En el menú de los muertos también están incluidos:
- Dulce de leche
- Camote
- Chocolates
- Tamarindo
- Cocadas
- Conservas de frutas
- Peras e higos cristalizados
Desfile del “Día de los Muertos”
En varios lugares del país se lleva a cabo este desfile. El de Ciudad de México dura unas 3 horas, parte desde el Ángel de la Independencia, sigue por Reforma hasta la Avenida Juárez, Tacaba, Bolivar y 5 de Mayo, con destino final la Plaza de la Constitución.
A lo largo del desfile de este “carnaval” se ven carros alegóricos, disfrazados y pintados para la ocasión, bailarines, marionetas gigantes de esqueletos, y Alebrijes, que son figuras muy coloridas de animales imaginarios.
Si quiere participar como espectador, tiene que salir temprano para lograr un buen sitio y apreciar el desfile de la muerte, representada por las culturas prehispánicas, la española, la colonial, el virreinato, la Revolución mexicana y algunas catrinas.
Desfile de Catrinas y Catrines
El desfile de Catrinas en Ciudad de México inicia alrededor de las 5 de la tarde y tiene su día especial. Se convoca a hombres y mujeres que deben llevar su traje con motivos mexicanos, nada que tenga que ver con Halloween. En el punto de encuentro hay maquilladores que darán el toque final al disfraz, para recorrer las calles desde el Ángel de la Independencia hasta Bellas Artes.
“La catrina” fue creada por el caricaturista mexicano José Guadalupe Posada cuyo nombre original era “Garbancera, como se conocía a las personas de origen indígena que vendían garbanzos y tenían pretensiones de europeos. El grabado mostraba a una calavera con un sombrero de flores y plumas.
Posteriormente, Diego Rivera en su mural “Sueño de una tarde dominical en la Alameda Central” pinta a la catrina de José Guadalupe Posada, con vestido y estola de plumas, y acompañada entre otros del mismo pintor como un niño, Frida Kahlo y el caricaturista.
Si viaja a Aguascalientes, a la entrada de la ciudad encontrará un monumento de una catrina, que es además figura principal de la Feria de las Calaveras para el Día de los Muertos.
Si escogió viajar por estas fechas y explorar México, tiene varias alternativas además de la capital. Hay varios pueblos, también mágicos, que le van a sorprender como en los estados de Hidalgo, Michoacán, San Luis de Potosí y Guanajuato.
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